PRIMERA PARTE
Buenos noches amigas y amigos, les damos la bienvenida a la primera audición de Clásicos del futuro, en este 2008, que debe comenzar para todos con buenas expectativas y cargado de energía positiva en relación con todos los aspectos de nuestra existencia.
Los estamos invitando a sintonizar este programa a través de la web: www.pereiraculturayturismo.gov.co, del Instituto de Cultura y Turismo de Pereira, con reproducción simultanea en la Web: www.voceslibresdeamerica.net de nuestro compañero y amigo Germán Escobar, para quien enviamos un saludo cordial y unas sonoras felicitaciones por ese proyecto de Radio Comunitaria en Internet para la promoción de la Cultura, el Conocimiento y el Software Libres. También los invitamos a visitar nuestros naciente blog: www.clasicosdelfuturo.com comenzado a estructurar también con la ayuda de Germán y de su empresa MARCOPOLO y el BLOG: www.clasicosdelfuturo-rac.blogspot.com. Para sus comentarios y opiniones, hemos creado el correo electrónico: clasicosdelfuturo@gmail.com
Y bueno, nada mejor para comenzar este nuevo ano que recordar a una de las figuras mas emblemáticas de los anos 70s, símbolo de toda una generación que en la reclamación de la Paz y el Amor encontró su sentido fundamental. Estamos hablando del denominado “Hippie Bueno” Cat Stevens, ahora llamado Yusuf Islam, quien retornara en los anos 90s para reeditar lo mejor de su producción musical, regalándonos el álbum REMEMBER, The Ulmimate Collection.
Cuentan que bañándose en la playa de Malibú (California; EE.UU.) la marea le arrastró mar adentro y estando a punto de morir ahogado ofreció su carrera a Dios, si este le salvaba; pocos minutos después estaba a salvo en la orilla. Sea cierta o no la anécdota, el autor de Father and son y Sad Lisa, hombre enfermizo y confuso, se convertía al Islam después despues que el Corán cayera en sus manos un buen día, tal y como lo contó en una entrevista que publicó el diario La Tercera, de Chile: «Nunca supe, supongo, cuando estaba hablando metafóricamente acerca del Peace Train (Tren de la paz) y de este tipo de ideas como On The Road to Find Out (El viaje para descubrir) y Miles From Nowhere (Las millas de ninguna parte): esos fueron los tiempos de los temas que describen mi búsqueda. El hecho es que finalmente llegó un día y de repente un libro cayó en mis manos, esa fue la primera exposición al Islam».
Cat Stevens, inglés de ascendencia griega, comenzó a sonar con fuerza en 1966 año en que publicó Matthew and son, su primer éxito mundial. La canción ya mostraba lo que sería el eje central de sus obras posteriores: el conflicto intergeneracional que colaboraría en el alumbramiento del mayo francés de 1968, la isla de Wight, la lucha contra la guerra del Viet-Nam y la aparición del pop. Como nadie, supo interpretar el lado melancólico, romántico (a veces casi empalagoso) y pacifista del movimiento hippie y, como nadie también, puede representar el confuso horizonte ideológico y social de los jóvenes que protagonizaron la revolución del amor y las flores.
Amables oyentes, esta noche en Clasicos del Futuro, CAT STEVENS y su álbum REMEMBER del ano 1999.
¡BIENVENIDOS!
SEGUNDA PARTE
Tea for the Tillerman catapultó definitivamente a la fama a Stevens. Father and son (Padre e hijo) se convirtió en el símbolo del alejamiento de los jóvenes (miles de ellos se marchaban en esos momentos de casa) de una sociedad paralítica, trasnochada, anclada en el «estado del bienestar» y, por lo tanto, desprovista del sentido de la aventura, de la búsqueda de lo nuevo. En esta canción, el padre intenta disuadir al hijo de que se aleje de él, aduciendo que el matrimonio (la vida) es complejo; el hijo, amable y comprensivo, le intenta convencer de que él tiene también derecho a buscar su destino; y todo ello con el trasfondo de una música de excelente factura, en la que destacaba la bien timbrada voz de Stevens haciendo los «papeles» del padre y del hijo: una verdadera delicia estética.
Después del Tea for the Tillerman, aparece Teaser and the Firecat (1971); Morning Has Broken y Peace Train (2), confirman la extraordinaria sensibilidad de Stevens para con el signo antibelicista de los tiempos. Cat Stevens no sonaba demasiado en las salas de baile, pero sus canciones las tarareaban masivamente los jóvenes haciendo suyas las ideas de amor y paz que transmitía el cantante que, poco a poco, se deslizaba hacia las religiones orientales, fundamentalmente de corte budista.
Catch Bull at Four (1972), su siguiente vinilo, fue también un enorme éxito que resonó como un latigazo: Stevens no era Bob Dylan, pero consiguió que la juventud cantara en latín. La portada del disco, también dibujada por el cantante, trasluce de manera clara la evolución orientalista ya comentada.
Foreigner (1973), es el nuevo disco que deslumbra con una impecable suite en donde el cantante se recrea en excelentes solos de piano. Pero, poco después de su publicación, «Gato» Stevens enferma de tuberculosis y desaparece de la escena. Algunos piensan que es en estos momentos cuando el cantante comienza a entrar en contacto con el Islam, Lo cierto es que en 1974 lanza Buddah and the Chocolate Box, un álbum decorado con sus sempiternos e infantiles dibujos, y que ahora reflejan sin ninguna duda un momento religioso de clara inspiración budista. En una de sus canciones (Music) Stevens escribe: «Échale un vistazo al mundo / Piensa en cómo se acabará / No habría guerras en el mundo / Si todos se unieran al grupo / Piensa en la luz de tus ojos / Piensa en lo que debes saber / No habría guerras en el mundo / Si todos se unieran a esta canción».
Pero poco le quedaba ya a Cat Stevens de las ideas que habían inspirado a tantos miles de jóvenes en el mundo. En 1975 aparece Numbers, confuso e infumable disco de espectacular diseño que marca el comienzo de la despedida del cantante con su «público». En 1978 publica Back to Earth, después el silencio hasta 1981, momento en que anuncia su conversión a la fe del Islam y vende todo lo que tiene para integrarse en dicha comunidad. Luego, el olvido y el desprecio de muchos de los que creyeron en él, cuando se informa que apoyó la condena a muerte de Salman Rushdie, por publicar los Versos Satánicos, libro que la comunidad musulmana considera herético; Cat Stevens lo niega varias veces, pero es expulsado de Israel sin que le dejen pisar este país.
Prayers Of The Last Prophet (1998), I Have No Cannons That Roar (1998) y A is for Allah (1999), son las últimas producciones de Yusuf Islam, pues Cat Stevens (él mismo lo dijo una vez), el hippie bueno, ya está muerto. Sin embargo, también es cierto que Stevens propicio en los 90s el fin de su autorreclusión, declarando: «Probablemente comencé a cambiar en 1995, cuando volví a entrar en el estudio de grabación para registrar discos que contribuyan a comprender algunas de las bellezas de la vida y de mi fe. Y me di cuenta de que mis viejas canciones todavía representaban una actitud limpia y transparente, y que no merecían el olvido».
Los invitamos a continuar escuchando “La última Colección” de Cat Stevens: REMEMBER
1 comentario:
Muy BUENA PAGINA. FELICITACIONES
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